Diputados dio media sanción a la Ley de Inocencia Fiscal: un cambio histórico a favor de los contribuyentes
12/18/20252 min read
La Cámara de Diputados dio media sanción a la Ley de Inocencia Fiscal, una de las reformas más relevantes del paquete de modernización del Estado impulsado por el gobierno de Javier Milei, que busca terminar con la persecución fiscal arbitraria y poner límites claros al poder del organismo recaudador.
La iniciativa representa un giro profundo en la relación entre el Estado y los ciudadanos que trabajan, producen y pagan impuestos, especialmente monotributistas, autónomos, profesionales y pymes, es decir, quienes no viven del empleo público.
El contribuyente deja de ser culpable por defecto
Uno de los cambios más importantes de la ley es la inversión de la carga de la prueba.
A partir de ahora, el contribuyente será considerado cumplidor e inocente hasta que ARCA demuestre lo contrario, poniendo fin a fiscalizaciones automáticas basadas en presunciones sin sustento real.
Este punto es clave para terminar con años de abuso burocrático y persecución administrativa.
Menos criminalización: cambios profundos en el Régimen Penal Tributario
La ley eleva de forma drástica los montos mínimos para que una infracción sea considerada delito penal:
Evasión simple: pasa de $1.500.000 a $100.000.000 por impuesto y período fiscal.
Evasión agravada: se eleva a montos mucho más altos, que en algunos casos llegan hasta $1.000 millones.
Otros delitos tributarios, como retenciones indebidas o facturas apócrifas, también registran aumentos similares.
El objetivo es claro: dejar de tratar como delincuentes a contribuyentes comunes por montos insignificantes.
Fin a las denuncias penales arbitrarias
La norma establece límites concretos a las denuncias penales por parte de ARCA.
No podrá denunciar cuando:
existan diferencias interpretativas,
haya errores técnicos,
o el ajuste se base únicamente en presunciones sin pruebas adicionales.
Además, se incorpora la posibilidad de extinguir la acción penal pagando la deuda, junto con intereses y recargos, priorizando la regularización por sobre la persecución.
Menos presión, más previsibilidad
Otro cambio clave es la reducción del plazo de prescripción, que pasa de 5 a 3 años para los contribuyentes que presenten sus declaraciones juradas en tiempo y forma.
Esto otorga mayor seguridad jurídica y previsibilidad, especialmente para pequeños y medianos contribuyentes.
Ganancias simplificado: menos burocracia, más claridad
La ley crea un Régimen de Declaración Jurada Simplificada para el Impuesto a las Ganancias, de adhesión voluntaria.
En este esquema:
el impuesto se calcula solo sobre ingresos facturados,
sin analizar consumos personales ni incrementos patrimoniales.
Una medida pensada para facilitar el cumplimiento y reducir el miedo a fiscalizaciones discrecionales.
Un cambio de paradigma impulsado por Milei
La media sanción de la Ley de Inocencia Fiscal marca un antes y un después:
el Estado deja de tratar a los ciudadanos como sospechosos permanentes y empieza a respetar al que trabaja y produce.
Para el Gobierno de Javier Milei, es un paso clave hacia una Argentina con:
menos persecución,
más libertad económica,
y reglas claras para crecer.